Pero nos equivocamos. Nos enteramos de que no lo querían y que se pasaba el día en un cuartillo, muy triste. Chispa es un perrito muy cariñoso.
De vuelta a Sanlúcar, Chispa estaba contento. Por fin, podría tener una vida mejor. Parece que lo intuía. Nosotras estábamos deseando que así fuera.
Bueno... Tuvo un poco de mala pata porque se rompió una patita, pero fue cuidado con mucho cariño y pronto se recuperó.
Siempre fue un perrito muy alegre y muy cariñoso. Disfruta con todo el mundo y quiere a todos.
Ahora Chispa ya tiene un hogar. Ha sido adoptado y esperamos que su vida sea la que se merece. Él seguro que va a adorar a su familia.
MUCHAS GRACIAS A TODOS LOS QUE NOS HAN AYUDADO A QUE CHISPA TENGA UNA VIDA MEJOR.